Gente que viene y bah

¿Cuántas probabilidades hay de que te toque el gordo de la lotería? ¿O de que el chico con el que estás a punto de casarte se líe con la presentadora más guapa de la tele la misma semana en la que además pierdes el trabajo?
A Bea le acaba de pasar (excepto lo de la lotería); así que decide huir y refugiarse en la casa de su excéntrica familia buscando un poco de paz, aunque acabará trayendo el caos a la vida de todos. Bea es así. En esta novela vas a encontrar un mercedes rosa, una casa en los árboles, un pelirrojo de caerse de espaldas (literalmente), muchas risas y unas cuantas lágrimas de esas que se lloran a gusto, que te liberan y te reconcilian con la vida. Una historia con la que descubrirás que siempre hay algo bueno esperándote a la vuelta de la esquina. Si sabes verlo. Y si no la cagas.

Título: Gente que viene y bah
Autor: Laura Norton
País e idioma de origen: Español (España)
Género: Romance
Editorial: ESPASA
Encuadernación: Tapa blanda
Número de páginas: 478
Fecha de publicación: Junio 2015
ISBN: 9788467043402
Precio: 18.90€

Opinión de Cristina

(CON spoilers AVISADOS)

Este libro me ha encantado y creo que ha sido en parte porque lo he cogido justo en el momento en el que necesitaba este tipo de historia, con una protagonista, una familia y unos acontecimientos que parecen de chiste. Para disfrutar de esta novela creo que hay que ir sabiendo lo que te vas a encontrar y sin juzgarla demasiado disfrutar de lo que te vas encontrando por muy inverosímil que parezca.

Bea, nuestra protagonista es una loca, histérica, cabezota, impulsiva y poco razonable. Podéis imaginaros la clase de situaciones en las que se mete a lo largo del libro, pero todas de risas y en la mayoría saliendo mal parada y quedando mal. Muchas veces he pasado yo hasta más vergüenza que ella.

Sin embargo el resto de su familia no se queda corta: la madre es una cachonda, de estas modernas que les habla a sus hijas de las relaciones sexuales con su padre (me ha encantado este personaje), Débora tiene un hijo enano porque se tiró al stripper enano de su despedida de soltera y se quedó embaraza y ahora tiene que dar explicaciones a su marido; Fin, el sobrino con crisis existenciales o León, el hermano gay que sale con un Guardia Civil.

En fin, las movidas en las que se mete esta familia, en la mayoría de casos por culpa de Bea, son poco realistas, pero eso mismo las hace tan divertidas. Además la forma de abordar los problemas me llama mucho la atención porque parece que están todo el rato de broma, sin darle importancia, muchas veces a cosas que realmente la tienen (como el problema del niño).

Los diálogos muchas veces resultan disparatados pero siempre te sacan una sonrisilla. Además, (se ve que llevo tiempo sin leer en español) las conversaciones son muy graciosas, siempre con gente metiéndose por medio. La autora utiliza un lenguaje muy coloquial y cercano con muchas expresiones juveniles e incluso tacos. Los diálogos son la parte que mayor peso tiene en el libro y para mi gusto están muy bien llevados, ágiles y rápidos de leer.

Creo que la autora reparte muy bien las partes de las historias de la familia con la vida amorosa de la protagonista, que se va a pique cuando su prometido le pone los cuernos con una presentadora de televisión. Sin embargo, en seguida encontramos a Diego, el macho del pueblo de Cantabria con el que empezará una relación de odio-odio muy entretenida.

Me ha gustado el tira y afloja de estos dos personajes, y como Norton logra transformar los sentimientos de Bea sin que quede forzado. Diego me parecía un personaje muy interesante por ese aura de misterio que lo envolvía y esa frialidad que hacía que realmente no supieses que estaba pensando. Sin embargo *Spoiler* luego se descubre su lado payaso cuando termina liándose con Bea. En cierto modo esto lo encontré divertido, y al mismo tiempo, me decepcionó un poco porque acababa con el ideal que me había hecho del personaje xD *Fin spoiler*

Un libro entretenido, de lectura rápida, con dosis de romance y situaciones divertidas.